Las serpientes, o conocidas a veces como ofidios, son animales del tipo reptil que pertenecen al orden Aquamata, que se distinguen bien dada su ausencia de patas, y por tener un cuerpo alargado con el cual normalmente se arrastran por el suelo.
Si bien es cierto que se conocen datos, sobre todo negativos de las serpientes, no todos son ciertos, y adicionalmente, existen curiosidades de las serpientes realmente interesantes que valen la pena conocer para cambiar la perspectiva de este animal.
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Gran cantidad de especies

Según el último recuento, hay unas 3.789 especies de serpientes, un número impresionante, lo que las convierte en el segundo grupo más grande de reptiles después de las lagartijas, siendo bastante variadas.
Australia tiene más serpientes
Solamente en Australia viven aproximadamente 140 de las especies de serpiente, de hecho, es por ello que dicen que los australianos viven entre animales peligrosos.
Además, de las 23 especies de serpientes mortales, 21 se encuentran en Australia, las cuales son capaces de causar la muerte en cuestión de horas o minutos.
Países donde casi no hay serpientes
Mientras que Australia es el hogar de serpientes mortales, su vecino Nueva Zelanda literalmente no tiene serpientes. Del mismo modo, no encontraría serpientes en Islandia, Groenlandia, Terranova, Irlanda y la Antártida. Esto se debe a que las serpientes no pueden sobrevivir en temperaturas frías.
No son animales de sangre fría
Generalmente, las serpientes son etiquetadas como de sangre fría, pero esto no es cierto ya que su sangre no es fría. El término preciso es ectotérmico, lo que significa que su temperatura corporal es variable y está regulada por fuentes externas.
A diferencia de los humanos, las serpientes necesitan usar fuentes de calor, como el sol, para calentarse. Además, si las temperaturas caen por debajo de los 10°C, una serpiente quedará inmovilizada y podría morir si no se lleva a un ambiente más cálido.
El calor extremo las afecta
El calor intenso puede ser malo para las serpientes. El calor puede desencadenar el instinto de hambre de una serpiente y, sin una presa alrededor, puede comenzar a comerse. Así que sí, una serpiente estresada puede comerse a sí misma.
Huelen por la lengua
Si bien las serpientes tienen orificios nasales, no huelen a través de los mismos, sino que lo hacen con su lengua, por ello la sacan constantemente, para percibir olores y sabores, que por supuesto le ayudan a comer.
¿Por qué mudan su piel?
Se estima que las serpientes mudan su piel 3 veces por año, y en medio de este proceso no solo dejan de comer, sino que se vuelven apáticas. La razón de su muda es porque le es de utilidad para reparar su piel y sanar heridas.
Única especie con sentido familiar
Las cobras reales son el único tipo de serpiente con un fuerte sentido familiar. A diferencia de la mayoría de las especies de serpientes que abandonan a sus crías, las cobras reales crean nidos y defienden a sus crías.
Matan miles de personas al año
Según los informes, las serpientes matan a más de 40,000 personas cada año. Sin embargo, los casos no registrados pueden ascender a 100.000 muertes. Lamentablemente, alrededor de la mitad de estas víctimas han sido de la India.
Comen animales más grandes
Existen serpientes realmente enormes, como las anacondas y las pitones, pero lo sorprendente es que las serpientes en general son capaces de comer animales más grandes que ellos, como lo es por ejemplo una vaca o un caimán.
No son capaces de masticar
Los dientes de las serpientes tienen una estructura especial para atrapar a sus presas una vez las muerden, por lo que no pueden huir. Lo curioso en realidad es que, a pesar de ello, sus dientes no están hechos para masticar, por ende, tragan las presas enteras.
Son animales que tienen huesos
Debido a su excelente flexibilidad, se podría pensar que las serpientes no tienen huesos, por lo que serían invertebrados, pero en realidad, el esqueleto de una serpiente tiene entre 600 y 1800 huesos, según la especie.
Raro apareamiento entre anacondas
Es bien sabido que el sexo animal puede volverse bastante extraño, pero los hábitos de apareamiento de la anaconda lo llevan al siguiente nivel. En lugar del macho y la hembra habituales, el apareamiento de anaconda consta de 1 hembra y alrededor de 12 machos en una especie de bola de apareamiento.
Antes las serpientes tenían patas
Puede ser difícil de creer, pero las serpientes solían tener patas durante 70 millones de años. Se ha indicado que perdieron las patas para ser capaces de vivir en madrigueras y así cazar más fácilmente, además de para habitar en el agua.
Existe una isla de las serpientes
Hay una isla en Brasil que solo tiene serpientes. Se trata de La Ilha da Queimada, más conocida como Isla de las Serpientes. Alberga una población de serpientes de 5 serpientes por metro cuadrado. Para bien o para mal, el lugar está fuera del alcance de los turistas.
Hay serpientes voladoras
Al hablar de serpientes voladoras muchos piensan que tendrán alas, pero no es así, aunque parece que vuelan, recorriendo hasta 30 metros de un sitio a otro. Por suerte no son todas las serpientes, sino algunas de sudeste asiático.
Sus ojos revelan si son venenosas o no
En general, las serpientes venenosas tienen pupilas hendidas o elípticas, mientras que las serpientes no venenosas suelen tener pupilas redondas. Por supuesto, hay ciertas excepciones. Sin embargo, si se encuentra con una serpiente, es mejor mantenerse alejado.
La mamba negra es la más rápida
La mamba negra puede moverse de 4,32 a 5,4 metros por segundo y es la serpiente más rápida del mundo. Su veneno es muy potente. Aunque el desarrollo del antídoto ha reducido las muertes, la serpiente mortal todavía mata a unas 20.000 personas al año en África, eso sin contar el resto de los continentes.
Una serpiente que puede dejarte ciego
La cobra escupidora de Mozambique es otra especie mortal originaria de África, la cual puede escupir a las víctimas a más de 8 pies de distancia. Además, la cobra puede escupir desde cualquier posición y tiene una tasa de precisión del 100% para objetivos dentro de 2 pies. Por lo general, apunta a los ojos y deja a su objetivo completamente ciego con su veneno.
Las serpientes de dos cabezas no sobreviven
En general, creemos que la serpiente de dos cabezas es mortal y tiene una tasa de supervivencia. Sin embargo, en realidad no duran mucho ya que las dos cabezas compiten por la comida y tienden a atacar a la otra. Este es uno de los hechos inquietantes pero tristes de las serpientes.
Existe un vino de sangre de cobra
Si pides vino de sangre de cobra en Vietnam, el cantinero tomará una cobra viva, le cortará el vientre y drenará la sangre en un vaso de vino de arroz. El alcohol desnaturaliza el veneno, lo que hace que el vino sea completamente seguro para beber.
No se debe lavar una mordedura
Hay muchas interpretaciones erróneas sobre cómo lidiar con un ataque de serpiente. Sin embargo, cuando se trata una herida de serpiente, nunca se debe lavar la herida con agua, aunque no parezca la gran cosa.
Enjuagar una mordedura de serpiente con agua hará que sea más difícil para los respondedores de emergencia identificar qué serpiente los mordió. Esto dificultará el proceso ya que no sabrán qué tratamiento administrar.
La fobia a las serpientes es común
Aproximadamente 1 de cada 3 humanos adultos tiene fobia a las serpientes, lo que la convierte en una de las fobias más comunes reportadas, la cual se llama ofidofobia, que implica tenerles fobia a todas las serpientes aun si no son peligrosas.
Las especies más peligrosas
Si hay algo por lo que son famosas las serpientes, es por su peligrosidad, aunque no todas son venenosas, pero entre las que sí lo son están la víbora de la muerte, la mamba negra, la cobra filipina, la taipan de la costa y la serpiente tigre, que son mortales.
Digieren casi todo lo que comen
Las serpientes tienen un amplio menú al momento de comer, tanto animales como personas, y cuando empiezan a tragar, con excepción del pelo, las garras y las plumas, las serpientes pueden digerir todo, incluyendo los huesos.
Diferentes formas de reproducción

No todas las serpientes se reproducen igual, ya que están las ovíparas, que ponen huevos fuera de su vientre, las ovovivíparos que ponen huevos, pero dentro del vientre, y por último, las vivíparas, cuyas crías crecen dentro del vientre materno.